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lunes, 12 de marzo de 2007

La corrupción del PSIB "no es lo mismo"

la gracia le sale innata
Cuando saltó el caso Andratx, el PSIB y acólitos debieron ver el cielo abierto. Más de uno de estos inútiles gestores socialistas al servicio de no se qué turbios intereses, debió decir algo parecido a Paul Bremer cuando apresaron a Sadam: "Ladies and Gentlemen, we got him" (le cogimos)…

Pero su gozo en un pozo porque aquel escándalo no sirvió para su fin principal: desacreditar la buena labor de Matas con un gobierno pleno de actuaciones que contrasta con el yermo del Pacte. Nadie del Govern resultó salpicado (según el juez) e Hidalgo ya hacía de las suyas cuando figuraba en las listas del PSOE.

Pero hete aquí, que la liebre también salta en filas socialistas con casos parecidos de corrupción. Pero oh maravilla, que casi ni nos enteramos y cuando lo hacemos, "no es lo mismo", como la canción.

Y es que también lo dejó claro Simancas en Madrid: que la corrupción del PP es siempre mala y la del PSOE es buena y recomendable porque es por un fin social. ¿Por qué no va a valer eso en Mallorca también? Pues claro.

Ahora no es Andratx sino Puigpuyent. Ahí se ha destapado el caso Ramón, donde el hermano de concejal del PSOE ha recibido 80.000 € en contratos en un año. El tema es lo de siempre: contratas a dedo desde el Ayuntamiento, a ser posible por debajo del limite legal que permite la ley. Constituyen una sociedad (Guimasa S.L) fundada por algún familiar y el concejal socialista en este caso, no mira más. Todo a la misma.

Aunque la gracia la pone esta vez Francina Armengol al decir que no se pueden comparar casos porque no es lo mismo. No hay nada de ilegal en Puigpunyent aunque pidió insistentemente la renuncia del concejal de urbanismo de Calvià por un caso idéntico (el caso León). En este ultimo, Carlos Delgado instó a su concejal a dimitir cosa que hizo finalmente.

En el caso de Puigpunyent, el concejal Ramón ni siquiera apareció por el pleno siguiente, ni el alcalde dio más explicaciones. Lo dicho: "no es lo mismo".

1 Comentarios:

  • At 12 de marzo de 2007, 18:26, Anonymous Anónimo said…

    Los acontecimientos en Calviá y Puigpunyent proporcionan una nítida imagen de la medida de la estatura moral del PSIB/PRISOE. Bueno, el término adecuado es catadura.
    Por un lado, la actuación del PP en Calviá, donde el teniente de alcalde delegado de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento, Alberto León, dimitió inmediatamente del cargo, al conocerse la adjudicación por parte del Consistorio de unos contratos a la empresa de su hermano.
    En Puigpunyent se descubren pagos irregulares a empresas vinculadas al hermano del concejal de Hacienda, el socialista Miquel Ramón. ¿Dimitir?. ¿Cesar?. Allí no se conjugan estos verbos.
    No insistiré en que lo deseable sería que un político llegase al poder como consecuencia de haber demostrado al electorado su valía, honradez y honestidad; la corrupción es execrable, venga de donde venga. Podríamos entrar en disquisiciones sobre la idoneidad de quienes ostentan cargos públicos, incluso en el, al parecer tabú, tema de las listas abiertas, pero sería demasiado prolijo para este artículo.
    Dos hermanos, dos ayuntamientos, dos concejales, dos “presuntos” chanchullos. ¿Idénticos no?. ¡Pues, no señor!.
    Resulta que, como era de esperar, por parte del PSIB y sus correveidiles mediáticos se han hartado de tronar contra la derecha corrupta, crucificar al Sr. Delgado y a su concejal y escandalizarse ante la forma de hacer política del PP. Partido que, por otra parte, en el momento en que aparece la "sombra de la sospecha", reacciona de la única forma que cabe: apartando la manzana del cesto.
    Pero, ¡ay amigo!, cuando, por ejemplo, se pregunta a la Sra. Armengol, que se ha caracterizado por exigir responsabilidades en el tema de Calviá hasta al Lucero del alba, sobre su opinión sobre Puigpunyent, suelta impertérrita que no son casos comparables, y despacha el asunto con una verónica, sin inmutarse, ¡Bravo por na Francina!.
    Y no para aquí la chulería, no solo no dimite el concejal, encima le “premian” incluyéndole en la lista, creo que el séptimo, del Consell. Tal vez como pago a sus, a buen seguro, ímprobos esfuerzos por la causa.
    Cabe recordar tambien el caso del Sr. Manchado, candidato del PSIB (!oh casualdad!) en Calviá, imputado por prevaricación, falsedad documental y malversación.
    Los dos vicios mayores del PSIB/PRISOE, de la izquierda en general, son la propaganda y la vanidad. Un partido reducido a mera propaganda y unos dirigentes que ejercen su liderazgo de modo vanidoso son dos grandes tragedias; pero no les preocupa, cuentan con esa absurda hiperlegitimidad moral de la izquierda, que una sociedad ignara y acomodaticia les ha otorgado; cuentan con el “napalm” de una demoledora propaganda que arrasa los cerebros, con la complicidad de sus terminales propagandísticos y de agitación social. En definitiva, se consideran impunes mientras chapotean en un inmenso océano de sinvergonzonería.
    RECAREDO

     

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